Mirando y contemplando, el cielo, contemplando la inmensidad de la vida, a veces nos parece que hemos vivido un montón de cosas y para nosotros es un mundo, pero por ahí es insignificante con la inmensidad que tenemos a nuestro alrededor.
Pero está bien hacer una pausa y contemplar todas las experiencias vividas, los aprendizajes.
Toda experiencia de vida, nos fortalece y nos anima a seguir adelante.
Miremos los diferentes colores que tenemos alrededor, un camino al cual seguir, pero no te quedes eternamente mirando el pasado. Mira, contempla y ahora da el paso, ve hacia adelante, deja el último escalón de esa escalera y anímate a volar.
Vuela libre como una mariposa y comparte tu vuelo con otras mariposas.