¿Por qué? Porque si estás ideando tu plan de vida, es necesario descubrir con qué energía, con qué vibración lo estás creando.
¿Cómo saber cual es tu vibración? Pues revisa en ti, si te enojas con facilidad, si tiendes a ver siempre el vaso vacío, si vives experiencias que no te hacen bien, si se te cruzan personas que te hacen daño, si ya te levantas de mal humor y estás todo el día igual, si vives quejándote de todo, si te estás en el lugar de la víctima siempre, si sientes que todo te pasa a ti, si te enfermas con frecuencia. Si te pones a armar tu proyecto y no puedes avanzar porque o no se te ocurre nada, o las ideas no son claras, ni tienen fuerza.
Bueno, si te reconoces en algunas de las cosas que te he comentado, no te preocupes, hay solución!!!
Lo importante y el primer paso, es reconocer que estás en esa baja vibración. El segundo paso puede ser anotar las cosas que te gustan hacer, porque ellas serán las que te ayuden a vibrar más alto. Por ejemplo, cantar, escuchar música, bailar, cocinar, jugar con algún niño, hablar con una persona mayor, leer, meditar, caminar, nadar, escribir.
El agua limpia y es como sanadora, prueba un día de esos que tengas malos y dúchate, pero obsérvate, en el antes y en el después, verás que te ha cambiado el humor.
El tercer paso, sería tomar acción, hacer algo de eso que te gusta.
La vibración es muy importante, mantenla alta, disfruta de la vida, comparte tu alegría, que si todos vibramos alto, podemos mejorar como sociedad.